Él se llamaba Moscrenk Storccink, que al escapar de Alemania le cambiaron el nombre y apellido por uno más sencillo, Marcos Fernández. Lo nombraron así, junto con un grupo de personas que recibieron el mismo apellido. Cuando él vino a Argentina era joven y unas personas lo contrataron para trabajar en la tierra. Era la primera vez que hacía este tipo de trabajo. Marcos Fernández tuvo esposa e hijos, los cuales son cuatro: Nanci (la mayor), Carlos, Marcos y Marta. Tres de ellos volvieron a Alemania y Nanci se quedó, con catorce años en un colegio como pupila. A los 18 años, comenzó a trabajar como enfermera y actualmente tiene su propio trabajo.Realizado por Romina Rocca 2º “C”
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